No sabía cuando llegaría este momento, pero tenia la certeza de que este blog volvería algún día.
Y os preguntaréis el: ¿por qué ahora? Dejé este blog para centrarme en un emprendimiento que surgió por la necesidad de ir a un ritmo lento y pausado. Y de eso hace ya 4 años. ¡Se dice pronto! Por aquél entonces, instagram estaba teniendo un protagonismo importante y estar allí, requería tiempo y dedicación. Necesitaba estar en un único lugar. Y como era de esperar, creció, vaya si creció! y sucede lo mismo que viene pasando con todo lo que crece desorbitadamente, que pierde esencia. He querido pensar que puedo vivir sin el, pero hoy en día estamos jodidamente enganchados a esta red social. Eso si no quieres decir «bye bye» a tu emprendimiento.
Pero sería tremendamente egoísta si no mencionase lo muchísimo que me ha dado instagram desde entonces. La maravillosa comunidad que he creado, todas esas personas que han comprado mis productos desde entonces. Gracias a ese escaparate, puedo seguir con el proyecto que me robó hace 4 años el corazón.
Vale, bien, y ¿por qué vuelvo? Desde hace mucho tiempo, siento mucha contradicción y dudas acerca de cómo gestionar mi proyecto: http://www.feelslikehome.es Esta duda me ha acarreado muchos bloqueos, situaciones en las que no encuentro el foco y me pierdo.
¿ Es posible llevar las riendas de un proyecto de forma profesional dando a conocer el ámbito privado de la persona que se encuentra detrás de el?
Mi respuesta es Sí, ahora bien, con límites. Y esos límites no he sabido definirlos en el transcurso de este tiempo.
Me ha costado mucho aceptar que necesito de una red social para hacer visible mi proyecto/pequeño negocio. Y me ha costado también entender que, pese a ser una persona altamente creativa, emocional, que necesita expresarse de forma natural, hay una parte que no interesa, es paja, es más, puede ser contraproducente para mi y el negocio con el que intento ganarme la vida.
No debo olvidar que necesito un lugar que sea exclusivo para poder resaltar mi trabajo, hablar sobre cada producto, la elaboración de estos mismos. Acercar al cliente a la experiencia que supone adquirir una de mis velas u otros productos que preparo artesanalmente y vendo.
Y la mayoría de veces la línea entre lo personal y lo profesional es demasiado delgada.
Conversando con mi amiga Erika. Nosotras no hablamos, hacemos verdaderos podcasts. Bueno, ella se mantiene tradicional escribiéndome, pero yo le someto a interminables audios y hoy salió este tema. Vivimos en una sociedad que necesita mostrar. Todo, absolutamente todo. Instagram es un verdadero espectáculo para el ego. Ya nada queda para nosotros. Y en ocasiones me veo participando de este juego. Reconozco que no le tengo pudor a ninguna red social. No me cuesta. Ha sido mi medio de trabajo durante muchísimo años. Primero con la fotografía, ahora con feels like home. Y para mi expresar con fotografías o palabras es fácil. Solo tengo que ser yo. Pero reconozco que a veces no tenemos control por lo que subimos.
He aquí donde feels like home me recuerda que todas las cosas no se pueden. Aunque intente hacerlo con cuidado.
Es por ello que después de mucho pensar y reflexionar, opto por un camino que creo que es el correcto. Vuelvo a retomar la presencia de este blog, aquí donde todo nació. Quiero que mi parte más creativa vuelva a recuperar un lugar donde pasear a sus anchas. Un lugar en el que no tenga que ceñirme exclusivamente en pensar como un «empresario» y si poder ser más yo sin sentir que la estoy «pifiando».
Un blog, es como la vieja escuela. Es libre pero ya con menos adeptos. Aún así, los que siempre hemos consumido uno, sabemos que aquí las cosas son más reales y van más «piano piano». Es la versión más auténtica y bella que los atropellados y fugaces stories de instagram poniendo una foto o un video lleno de filtros (en los que yo me incluyo). Aquí todo adquiere la coherencia del comienzo de un capítulo de ese libro que dejaste a medias hace una semana o ese volver a escuchar un viejo cd que hace mil no pones pero que cuando empieza a sonar se te vuelve a erizar la piel.
Aquí seguiré subiendo contenido varios: recetas (si, espero volver a retomar la cocina como antes), lecturas, momentos de quietud, fotografía de mis viajes, reflexiones, música, etc… Todo aquello que compartía por aquí de una forma honesta, auténtica. Y también de reflexiones e imágenes de mi trabajo, ¡por supuesto! Estoy segura que teniendo rienda suelta a ese contenido, podré mantener a raya esa necesidad a veces absurda de mostrar cosas que si creo que pertenecen a mi intimidad y que hoy en día sobran en instagram.
A partir de ahora pongo límites en mi cuenta de instagram al batiburrillo de cosas que voy subiendo personales (fotografías de cumpleaños y demás eventos,felicitaciones a amigos, una comida en familia, y un largo etc). Voy a intentar no perder esa cercanía, esa honestidad que creo que siempre han definido mis cuentas, pero si que voy a intentar ceñirme a mostrar, reflexionar o explicar los productos artesanales de Feels like home. Y espero veros allí porque es lo que verdaderamente me hace feliz. Y necesito que feels like home siga creciendo.
Para aquéllos que no conocíais este «viejo» blog, os doy la bienvenida 🙂
Para los que siempre habéis sido fieles a este blog, a mi recorrido desde el 2007… Ay, ¡que bueno volver a casa! Os echaba de menos!
Nos vemos!
…
Pd: para los que vais a echar un ojo al blog, recordar que hace 4 años que no hacia uso de el y necesita actualizarse en muchos aspectos 🙂 Lo único que he podido hacer es cambiar el título del blog para evitar confusión con mi proyecto ya que «feels like home» era el verdadero nombre de este lugar. Os iré contando.